Se cae el mundo de Sam.

"En las ventanas, rostros planos se dibujaban a la luz de un concierto de grietas y derrumbes"

 © Guillermo Asián

Fotografía de retrato. Talleres en Madrid

 

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Mi despedida

Suele pasar que los huecos los dejan los imprescindibles, en un mundo donde, cada vez menos, encontramos sensibilidad y amable comunicación.
Javier, nos has dejado huérfanos, al menos a mí, de tu humilde presencia de hombre aparentemente invisible, pero de inteligencia eminente y paciente razón.
Te he conocido poco, pero lo suficiente como para saber, al mirarte, que eras bueno.
Al final no te hice aquella foto con sombrero, quizás porque yo sentía miedo de robarte el alma en esas imágenes, y  provocar con ello el desenlace fatal.
Sin duda, podíamos haber sido muy buenos amigos.
Por favor, sé feliz allá y abona con tu sosiego ese campo de color donde algún día todo puede ser posible.
Un abrazo sin fin, Leiter, en la inmensidad...

Con mi propia óptica 26 marzo 2008

Posted by Leiter in Actualidad, General.  

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 Me gusta ver salir el sol sentado sobre el sillín de mi Rockrider, contemplar la nueva perspectiva de una ciudad invivible pero insustituible, como diría el gran Joaquín Sabina. La bici me otorga ese remanso de libertad que va asociado a una soledad consciente, a una escapada donde sobran las máscaras que se adhieren a nuestra alma como un mal sin remedio. Pedaleo sin brújulas que tracen mi ruta con otras sensaciones que no sean las propias de mi libre albedrío… O, por lo menos, eso es lo que intento. Me dejo llevar por los caminos del destino aunque todos acaben devolviéndome al punto eterno de mi origen. Procuro ser prudente y respetuoso en la circulación, pese a que, con cierto desencanto, observo como no se me corresponde con la misma moneda en casi todas las incidencias de cualquier trayecto. Sufro el esfuerzo propio de un aficionado al coronar las cimas no dejando de esbozar una sonrisa de esperanza en la cumbre. Por contra, me lanzo al descenso sin pensar en hipotéticas averías que den con mi cuerpo en el asfalto. No me preocupa la muerte, puesto que yo ya no estaré cuando ésta decida seducir mi vida. Sólo pienso en el deseo como fuerza vital que me guía por los recovecos de mi personal devenir. Y, contra lo que puedas pensar, hago altos en el camino para buscar las mejores flores que sirvan de adorno a tus inquietudes.
 Y ahí me ves, como sombra que rinde homenaje al mito de la caverna. Hace casi un año me incorporé a este mundo de dígitos y avatares, con el ansia de encontrar todo lo que mi espíritu requería. Me daba vértigo asomarme al balcón de las autopistas virtuales hasta que me decidí por expresar mis rutinas en un medio que conectaba con mis convicciones más íntimas y personales. Aprendí mucho de todo cuanto pudo escribirse y comentarse en aquel añorado foro de opiniones, hasta el punto que no pude sustraerme a la idea de su clausura. Cuando me encontraba con el corazón enlutado, un viejo compañero me sugirió que intentáramos perpetuar aquella agonía aunque sólo quedáramos los dos. Y, de momento, ahí sigo. Pero este blog no será una prolongación de EL COLOR DEL CRISTAL. Nace con la única pretensión de ser una pantalla de consuelos; eso sí, con mi propia óptica. Inauguramos, pues, este bar virtual de copas, LEITER´S BLUES. Ponemos en marcha los motores de esta nave espacial y tomamos el rumbo hacia la estrella más cercana, PRÓXIMA CENTAURI. Cuatro años y medio, viajando casi a la velocidad de la luz, nos separan de nuestro destino.

Post de Leiter´s Blues...

Desnudo masculino en fotografía

La aceptación del desnudo masculino en fotografía se ha producido mucho más tarde que la del femenino. En los origenes de la fotografía, cuando esta tenía la función de reproducir retratos al alcance de gentes adineradas, los fotógrafos percibieron un nuevo mercado emergente que dio lugar a la producción de fotografía de paisajes, calles y objetos. Paralelamente, el desnudo femenino se extendió rápidamente mostrando el cuerpo de la mujer, dado que en una sociedad esencialmente machista estaba mal visto el contemplar fotografías de hombres. No olvidemos que la mayor parte de los consumidores de fotografías de desnudo eran varones.

    Albert Londe, Male Musculature Study, 1890.

La posibilidad de conseguir modelos a  buen precio fomentó la fotografía de mujeres en actitudes eróticas, pero el tabú sexual, que agitaba  una sociedad conservadora, calificó las fotografías de obscenas o pornográficas. En el desnudo masculino el tabú se justificó aún más por la exposición de los genitales, más evidentes que en la mujer.

Las fotografías con mujeres desnudas  eran perseguidas por la justicia, que caía sobre sus  poseedores con penas de arresto e incluso de cárcel. Pero aún era más perseguida la posesión de imágenes con desnudos masculinos, consumidas casi exclusivamente por homosexuales en un mundo donde la homosexualidad era un delito.
Estas fueron algunas de las razones que limitaron el consumo fotográfico de desnudo masculino, permitiendo, eso sí, su realización en actividades socialmente aceptadas como el arte, la antropología, la  foto deportiva, etc...

   Eugen Sandow.

En mi condición de observador, y atendiendo a las críticas que habitualmente me llegan, he constatado que aún hoy día la contemplación objetiva del desnudo masculino, como obra de arte fotográfica, está sujeta a condicionantes morales y tabúes que inclinan la balanza a favor del desnudo femenino.
En mi opinión, la “avanzada” sociedad del siglo XXI aún estigmatiza la contemplación del desnudo fotográfico masculino, vistiendo de hipócrita modernidad una latente homofobia.

Pensar

   © Guillermo Asián.